jueves, 30 de octubre de 2014



Horas de encuentro consigo mismo, el silencio, o mejor, un rumor lejano de conversaciones y tráfico intenso, que acompaña pero no molesta, que deja pensar y verse sentado en las manecillas del reloj, repasando cualquier fantasía, cualquier sueño, humano, siempre humano, aunque a veces no se sea capaz de confesarlo. Son tantos habitantes rumiando entre el pelo, pujando por alcanzar el primer puesto y salir a la palestra de su dueño. Otras veces escondidos en lo recóndito, se niegan a aparecer aunque son convocados, parece que olvidamos aquello, pero no, ahí sigue, solo que no quiere salir a bailar a nuestro lado, ni hoy ni mañana, tal vez pasado o dentro de mil años.

Es el tic tac monótono que nos permite encontrarnos con nosotros mismos, como el minutero con el horario, aún no siendo el mediodía o la medianoche. Y la cabeza libre cual caballo desbocado, inflige tiranía sobre las manos, las piernas y el resto de órganos que se erizan ante la pantalla del cine de nuestra propia fantasía. Y componemos la película, aún con protagonistas que ni los habíamos estimado presentarse, pero aquí están, ¿por qué?. Para luego hacernos sentir culpables o felices.


miércoles, 29 de octubre de 2014








Un rato entre amigos de la Peña Personal Centroban, en La Rinconada, Sevilla, comentando sobre escritura y el libro CUANDO EL VIENTO DEJA DE SOPLAR.




Hoy, a las 19,30 hrs. en Prolongación de la Carretera Nueva 64, 
La Rinconada, Sevilla
(frente a la Farmacia)




martes, 28 de octubre de 2014

página 36




" ... El sol brilla para maximizar aún más los diferentes matices, desde el verde más vivo al oliva negro, del ocre agrio al amarillo fornido, pequeños goterones azulados y parduzcos quieren simular, quizá, pantanos, ríos o remansados humedales. La paleta de trabajo de un pintor impresionista no contiene tantos matices ... "   

página 36 "Cuando el viento deja de soplar".

domingo, 26 de octubre de 2014

página 116




"... A ras de suelo, el tiempo transcurre más lento y la visión es más concreta. Desde el cielo la realidad es una marejada imposible de tonalidades que se cruzan en un dibujo infinito. El sol desde la altura, crea toda una gama de colores, pero sobre suelo carece de la profundidad que otorga la distancia ... "

página 116, CUANDO EL VIENTO DEJA DE SOPLAR.   

martes, 21 de octubre de 2014



Volar ... volar ... volar ...

¿Alguna vez has sentido el deseo de volar?
Desplegar los brazos, elevarte al cielo,
sentir el aire en la cara ... volar,
que nadie te detenga, que el tiempo se detenga,
volar, sin destino, sin dueño,
observar desde arriba lo que ocurre aquí abajo.

Volar ... volar ... volar ...

Soñar cuando duermes ¿quién no ha soñado
que volaba?, ¿quién no se ha sentido en el aire?.
Sin tiempo porque lo cambiabas por libertad.

Sin alas, que no tenemos. Y volar.

Quiero volar sobre el mar.



domingo, 19 de octubre de 2014






Quien tiene la voluntad, tiene la fuerza, dijo el dramaturgo de la Grecia antigua Meandro de Atenas. 


Lucía podía haber sido una persona de riqueza y tal vez famosa, por su forma de ser, por sus estudios, por sus idiomas, por su capacidad, pero prefirió servir a quien no le podía pagar, a cambio, siempre fue lo que quiso y anidó donde le apetecía. Igual que árbol que nació de una rendija del acerado, pegada a un edificio, nadie la cortó y ella siguió elevándose, abriéndose paso por lo inverosímil, a pesar de la suciedad y la escoria a su alrededor, bebiendo el agua de la lluvia que el desagüe le traía desde el tejado. 

Alguien, admirado y caritativo con su acto de fe, en vez de troncharlo, decidió poner una cuerda que lo sujetara a la pared, para que su tronco, que con tanto esfuerzo se mantenía, no se doblara y sus hojas acabasen pisadas por los paseantes.

La voluntad es iniciar el camino aunque parezca imposible, aprovechando las pocas cosas que encontramos, quizá una pequeña ayuda y, al final, florecer esplendorosamente. La voluntad es la poesía de las cosas cotidianas, invisibles, pero tan importantes.